10.6.13

Fábrica de miel y cera con obreros venenosos

El alimento de las abejas está disperso. Es llamativo en contraste de color; amarillos oro contra granates potentes. Así cualquiera encuentra las metas de la alimentación. Pero no siempre son tan sencillas, tan claras. Muchas veces las vidas hay que ganárselas en un juego de complicada defensa. Resulta increíble que de estos polvos amarillos se pueda fabricar miel y cera por parte de obreros animales diminutos que además pican con veneno.