31.8.19

Yo a veces sueño con soñar. Soy así de despierto

Soñar es parte de los sueños. Y los sueños son parte de nosotros. Se puede soñar despierto, incluso… según me dicen, se puede soñar dormido. Nunca sabremos qué numero de sueños de los dormidos se logran cumplir y sin les ganan a los sueños de los despiertos.

No te fíes de lo que te enseñan. Puede estar manipulado

No te fíes de lo que ves, podría haber sido manipulado para que lo observaras con mejor ánimo de compra. Hay expertos en darle la vuelta a las cosas para que parezcan mas agradables. Simples engaños visuales para resultar distintos y poderse vender mejor.

30.8.19

A veces creo que yo mismo me estoy mirando

Y cuando eso sucede me entra una sensación extraña de idiotez elemental. ¿Se puede sentir una idiotez en grado sumo, una idiotez inteligente? 

El surrealismo no siempre son sueños sacados desde dentro, a veces son realidades sacadas hacia fuera. Pero no sé diferenciarlas. 

Cuando alguien se come la última galleta, me siento más idiota todavía. Soy de los que creen que la última hay que dejarla de muestra.

Soñar con los futuros, pero siempre desde los presentes

La madrileña Dandara Catete nos ofrece unas esculturas en Madrid de las que hemos extraído esta sección con la mirada personal del fotógrafo. Detalles de estructuras que sobre un mundo interior complejo y desconocido elevan los hogares azules de la esperanza por encontrar la luz, la libertad, el cielo que permite volar. 

La artista creadora sigue siendo ella, la mía es una simple reinterpretación de sus elementos. Un sueño, una mirada.

Y caminaban sobre el peligro, por que les gustaba

No sé —querido Prisco— qué hacen estas mujeres sobre la línea rota. Deben estar haciendo equilibrios para ser libres. Saben que salir o entrar de las cortadas es peligroso. Pero se saben capaces de dominarse y de pisar sobre seguro. Ya antes se cayeron varias veces y siempre se levantaron.

29.8.19

Un libro siempre es peligroso. Puede caer sobre una persona y convertirlo

—¡Me has engañado!, estaba este esclavo tachado de tonto y lo compré por veinte mil sestercios. ¡¡Devuélveme el dinero!! pues Gargiliano es muy listo. Es peligroso.

Marco Valerio Marcial

Vacío de quien no le importa el vacío

—Baso ha comprado por diez mil sertercios unas capas tirias del mejor color. Ha hecho un buen negocio.

—Tan bien ha comprado, dices?

—Ya lo creo. No piensa pagar


Marco Valerio Marcial

Un ojo de los muchos con los que te miran en las ciudades

Por las calles te miran. Es inevitable. Te miran incluso sin saber que te miran. A ojo. Con ojos. Desde los ojos más increíbles. Este no es mas que un ojo más.

28.8.19

Leopoldo Pomés se fue con sus imágenes de miradas

Ayer se nos escapaba el fotógrafo español Leopoldo Pomés, un catalán retratista que se pasó a la publicidad para seguir retratando a personas con miradas agudas y penetrantes.

Leopoldo Pomés fue uno de los artistas indiscutibles de la fotografía contemporánea española de la segunda mitad del siglo XX que supo hacer de la imagen el motivo de su vida. Normalmente eran las mujeres como elementos de belleza intrigante las que marcaron gran parte de su trabajo artístico, pero sin olvidarnos de que empezó en la fotografía social y urbana, con su mirada delatadora de realidades duras y complejas.


La geometría existe. Incluso en la vida real

La geometría es algo más que un libro antiguo. Pueden ser unas sombras, una artificial manera de quedar atrapado en la mirada.

La geometría existe. Aunque ahora ya no se quiera mirar con detenimiento.

Urbanismo madrileño de gigantes de peluche

En ese urbanismo de mezcla donde las personas se mueven hacia el caos o desde el caos, dos elementos permaneces quietos. El oso panda que tiene que sobresalir para ser observado, y la escultura del Rey sobre caballo que sirve perfectamente para que se posen las palomas asustadas. 

Nunca supuso Carlos III que estaría al lado de osos sin madroño, de dibujos animados o de artistas callejeros que casi vuelan entre equilibrios. Por cierto, la mirada del oso panda resulta casi amenazadora. 

27.8.19

Soy un cobarde. Nunca lo llegué a ver

Creo que tras la puerta se escondía algo ilegal tras leer el mensaje casi secreto. Me advertía de que dentro, en el solar, había que buscar un ladrón de forma urgente. 

Por si acaso el salía, me fui rápido. Nunca lo llegué a ver. Soy un cobarde.


La señora sentada observaba y tomaba notas. Cuidado

Observar es una cosa. Absorber es otra.

Aquella señora no se movía, sentada en su bando de espía, contemplando cómo se movía el mundo a su alrededor. Ella quieta, todo lo demás circulando.

Era una paisaje teatral donde no faltaban ni la nota con apuntes ni los cartones de atrezzo. Utilería para taparse por las noches.

Con dos dedos se sujetaba la boca, sus labios, para no hablar, para no gritarles, para esconderse. 

Me fui de la obra sin ver el final.

Una firma nada deseable pero que era belleza

La basura también se puede convertir en belleza. Lo uno es a veces paralelo a lo otro. Las firmas en la calle me parecen una aberración, un dislate de tontos aburridos. Pero eso no evita que a veces sean bellas. Hermosas a la mirada de algunas personas. Incluso la mía.

Luces, ténues colores, formas que trascienden al texto, contrastes. 

La vista muchas veces nos engaña

La imaginación pudo entrever sombras y formas, pero todas estaban equivocadas.

Nadie debe sacarnos del engaño visual, cuando este se produce.

Casi lo mejor es dejar que la realidad vuelva a su sentido lo que vemos, para sentirnos bien.

Nada hay como desengañarse por uno mismo.

26.8.19

Era tan frágil mi sueño, que se me escurría entre los dedos

Esta noche he tenido un sueño muy extraño y curioso. Soñaba que me servían vino blanco en una copa hermosa de cristal y al irla a coger se me deshacía entre las manos. Era como de papel donde el líquido no se derramaba hasta que yo la cogía con la mano y todo se convertía en débil, frágil, deforme.

Nunca pude probar el vino, no llegué a saber si merecía la pena seguir intentándolo o era una mal vino de polvos. Siempre la copa de cristal delgadísimo se me doblaba entre los dedos dejando escapar el líquido.

Terminé levantándome a beber agua del grifo.

El malecón de La Habana, lleno de esculturas

El malecón de La Habana es de esos lugares especiales del mundo que tiene vida propia. Es imposible no estar allí y quedar prendado de su clásica postal de tarde, con sus pescadores intentando decorar el paisaje.

Hay estampas inseparables de su lugar de origen, espacios que hay que mantener con sus personas dentro, como si formaran parte del paisaje. Son como estatuas decididas a perpetuarse en el espacio tiempo. 

Nota.: La imagen está enviada por Luis Iribarren, conquistador de mundos y de personas.

Hierros que nacen oxidados y muertos

La geometría del hierro parece eterna

pero depende del capricho del dueño

y de la utilidad de lo que nace ya condenado a morir

oxidado para que no sea capaz de seguir degradándose.



Nos interesan las formas, los colores, las utilidades. 

Los tiempos dependen de muchos más factores sin control.

25.8.19

Era tan grande que todos los demás éramos pequeños

Sensación de cinematográfico. 
De artificialidad. 
De haberlo visto antes mil veces. 
De no haberlo visto nunca. 
De empequeñecimiento. 

La niebla de la primavera intentaba ayudar con los volúmenes. Tuve que buscar el color donde no lo había. 

Los brillos de la vida que está de vuelta

Cuando uno está de vuelta corre el riesgo de dejar de estar de ida.

Y estar de ida también es necesario.

Estar de ida es mantener la curiosidad e. incluso, esa mínima ingenuidad sin la cual queda uno paralizado.

Salvador Pániker


Entrando en lo próximo, y sin mirar

Diría cualquiera que entrar es mucho más sencillo que salir.

Pero ese no puede ser un cualquiera.



Será con toda seguridad

alguien que ha haya salido con dolor

y sabe por experiencia que salir

supone cerrar

y cerrar siempre es mucho más complicado

que abrir.

24.8.19

Siempre somos como dos gorriones andando juntos

Andar de la mano es correr.

Correr de la mano es volar.




Pero para volar… no se puede ir de la mano 

…para no arrastrarnos en la caída.

Grandes aplausos. Hay mucha gente, sentados, de pie, escuchando

La sociedad tiene una decidida voluntad de no abandonar cualquier tipo de problema que pueda merecer una completa solución. 

Por eso aquí nos hemos reunido representantes de todo el mundo con el único fin de contribuir a la rápida y feliz integración de todas las personas dentro del orden social.

¿Vuelas contigo o contra ti?

Volar para mirar

Seguir volando…

y no parar

hasta que canse el alma de volar.

23.8.19

Un oso al que nadie se toma en serio

¿Dónde está el oso? La pequeña imagen de las personas reales contrasta con las imágenes publicitarias de las personas grandes que ayudan a vender. Los transeúntes no se lo están tomando en serio.

19.8.19

Todas las líneas se acaban. O se une consigo misma

Todas las líneas tienden a escaparse de nuestra vista. Pero todas ellas se acaban. La línea continua no existe. Es una simple línea cerrada que se vuelve a unir con ella misma. Todas las demás se acaban en algún momento. A veces… cuando menos te lo esperas.

Emoción. Simplemente emoción

Emoción. Dolor.

Recuerdos. Instantes de polvo.

Reflexión. Temor.

Vida. Muerte.

Esperanza. Libertad.

Silencio. Manipulación.


18.8.19

Ir hasta New York en busca de un culo no es habitual

Todo se puede ver desde diversas ópticas. Incluidos los culos. Ir hasta New York en busca de un culo no es habitual. pero se puede hacer y de hecho es posible que se haga. No fue mi caso, pues me encontré el culo de casualidad. 

El guía nos dijo que había que tocarle los testículos y yo que siempre llevo la contraria me limité a fotografiarle el culo. Simplemente me pareció mas estético y con un color menos "sobado". 

Este es el culo, la zona del ano, del toro de Wall Street de New York y un pequeño juego de miradas. También los culos deben ser fotografiados. Más… si como este, estaba recién duchado.

Vemos la libertad muy suave. Aunque sea una Estatua en New York

Vemos la libertad muy suave, como si se estuviera diluyendo en los tiempos, entre los vapores de la niebla falsa de los que interesan que no seamos capaces de verla de cerca.

Vemos la libertad diluida entre mentiras interesadas y tiempos de ocio programado para no mirar de frente. 

Vemos los que quieren que veamos. Miramos los que nos señalan para que no seamos capaces de mirar hacia los lados. 

Todo pasa. Todo se nos escapa poco a poco.

Mirando al cielo, en busca de la luz. Lo necesitamos

Necesitamos mirarnos hacia arriba. 


Arriba están todos los que no están abajo pero además estamos nosotros. 


Mirar hacia la luz lo saben hacer hasta las flores más sencillas. Pero a nosotros se nos olvida.

       No reces para dentro, tampoco para quien no conoces.


Rece para hablar contigo o con los tuyos.


                                      Y así lograrás respuestas.


Un habitante de New York que vino a saludarme

Las ciudades están llenas de habitantes, y no todos ellos son humanos. Hay ciudades donde los humanos son clara minoría y si hay dudas las pierdes enseguida que pasas unas semanas y en las habitaciones de los hoteles empiezan a robarte la poca comida que dejas sin encerrar.

Hay habitantes curiosos, amables, simpáticos, negros, roedores, miedosos, voladores, escarbadores o adaptados a la presencia de otros habitantes. En las grandes ciudades hay incluso muchos humanos jodiendo a otros humanos. 

17.8.19

Fotografía de un clavo clavado y feliz

Los clavos ya lo saben ellos, están para ser clavados. Y para recibir golpes en la cabeza. No hay otra y lo saben nada más nacer. En la fábrica ya se lo dicen los operarios. Así que su mayor gozo es cumplir su papel en la vida. Aunque sea algo torcido. ¿Para qué sirve un clavo que no está clavado? Es una molestia. Nadie quiere nacer para no vivir.

16.8.19

Los picaportes o aldabas… ¿no están al revés?

Un llamador es un objeto para llamar. Y la mayoría de ellos se componen de una mano cortada, sujetando una bola con la que golpear una pieza metálica.

Picaporte

Aldaba

Es curioso comprobar que estos elementos urbanos, personales y privados son bastantes similares por todo el mundo. Aunque haya varios ejemplos distintos. El de la mano me intriga.

Desde dentro de la puerta, del hogar, sale la mano con una bola a llamarse así misma. ¿No sería más lógico que la mano estuviera al revés y llamara desde la calle… con los nudillos a la puerta?

15.8.19

Pequeños milagros de color magenta

Pequeños milagros de color magenta. Venas débiles que alimentan hojas más débiles todavía. Suavidad para ver pues tocar es imposible. Belleza natural de lo más normal. Simplicidad.

14.8.19

Los animales se dividen en dos clases. Yo y los otros

Los animales se agitan para asombrar, para hacernos preocupar o para marcar territorio. A veces también para soltar lastre o para lanzarnos a la cara todo lo que les sobra.

Los animales somos muy animales, incluso cuando nos creemos poco animales.

Se nos nota en que nos movemos con vida propia, nos creemos poseedores de lo que nos rodea y dueños de nuestras decisiones, e incluso a veces en que sonreímos ante el convencimiento de que todo es manipulable, sin incluir a nosotros mismos.

Los animales se dividen en dos clases. Yo y los otros.

Palencia con un encuadre algo diferente

Hay escenas donde el encuadre elegido nos está pidiendo a gritos que sea atrevido, distinto, que intervenga en la fotografía para remarcar el conjunto o para añadirle un punto de vista que no sea de la clásica postal de quiosco. En arquitectura es una de las decisiones más lógicas y válidas, pero también en el arte que juega con la propia arquitectura a copiarla o a beber de ella.

Muchas veces un objetivo gran angular ayuda. Otra simplemente con una posición nuestra que sea más atrevida, acercándonos a una pared o desde una posición baja y levantando la cámara hacia el techo pero recogiendo en el encuadre algo de las paredes laterales para que surgan líneas y puntos de vista diferentes.

Las puertas viejas no tienen tirador que las tire

Una puerta vieja no la quiere nadie, no tienen tiradores, o si los tienen son tan viejos como ellas. Los hijos de las puertas viejas son hijos viejos. Y las carcomas se van apoderando de todos. O los óxidos. O los abandonos. O los cambios de color. Nadie quiere hacerse cargo de las puertas viejas. 

12.8.19

Lo feo es simplemente distinto. Ajeno a lo normal

Nunca he dejado de observar lo feo como algo bello.

Las roturas crean nuevas bellezas.

Las ausencias dejan huecos que sin cubrir vuelven a tener espacio propio.

            Nada es de un simple color, todo tiene matices.

Nunca he dejado de observar lo feo como una nueva posibilidad. 

                         ¿Y si lo feo fuera simplemente diferente?

Un llamador francés de mala cara

Un llamador francés. 


Y a nosotros qué nos importa si es francés o griego. 

¿En qué se diferencia un llamador de otro?





Tal vez en las respuestas.


10.8.19

El color tampoco es casualidad. Los pequeños toques

Con la fotografía también se puede jugar, reírse de lo natural o crear nuevas artificialidades. La creación está para eso, inventarse realidades y pensar en nuevas posibilidades visuales. Suaves toques o contundentes gritos, detalles o fuerzas impactantes. Depende del día, de las ganas, de tu propia sensación de ese momento. 

Los espectadores simplemente observamos, repensamos y diagnosticamos. Nos quedamos motivados o aburridos. Depende. Y de su comportamiento, del de los espectadores, depende que una imagen valga o no valga.

Lo peor es que no diga nada, no sea capaz de hacer sonreír o meditar o sorprender. 

En esta imagen hay decenas de hojas, podía haber elegido cualquiera de ellas para marcar el color. Pero lo he realizado con una pequeña, sin importancia, como retraída. Nada es casualidad.

Cristal arrugado a costa de mover la mirada

También el surrealismo, la abstracción figurativa se puede intentar con la fotografía. Todo depende de nuestra forma de mirar, de querer explorar dentro de la fotografía otros caminos diferentes a los habituales. Si nosotros vemos elementos "distintos" estamos ya dispuestos a presentárselos a los demás. 

No es necesario nada que no sea sentirse bien con mostrar las miradas propias de lo habitual. En fotografía también es posible seleccionar elementos comunes para mostrarlos como si fueran elementos totalmente artificiales.
Esta imagen es un simple cristal de baño formando estructuras reflejadas. Tras ello hemos convertido en blanco y negro la imagen y la hemos virado ligeramente. Lo más habitual también puede parecernos extraño si lo encuadramos desde otro punto de vista.

Hierros bellos que no bestias. Fotografía de hierros

Hierros de subida, hierros tumbados, hierros amarillos no oxidados. Hierros.

La fuerza del hierro se observa en contraposición con la delicadeza del cristal. La bella y la bestia. Pero nadie sabe quién es el más hermoso. Todo depende.

9.8.19

Las escaleras de subir son diferentes a las de bajar

Las escaleras de subir no son iguales a las escaleras de bajar. Se diferencian en sus alegrías. Las escaleras de subir ayudan a mirar hacia arriba. las escaleras de bajar te llevan a mirar al suelo aunque no quieras por tu propio gallardía. Los diseñadores de escaleras tienen que saber muy bien si son escaleras para subir o para bajar. Y colorearlas de forma diferente. Aunque nadie lo note pues a veces las utilizamos al revés. Subimos cuando en realidad estamos bajando. Y bajando cuando en realidad simplemente nos estamos cambiando de lugar.

¿Una fotografía es un segundo o un par de minutos?

Muchas veces una imagen viene sola a tu encuentro. Entré en este patio catalán y la luz era buena dentro de un nublado que ayudaba más que estorbaba a la calma y al pensamiento lento. Tan solo hacía falta buscar el encuadre. Agacharme un poco y disparar.

La belleza no es de la fotografía sino del propio patio. Es una clásica postal que sirve para recordar. 

De la puerta de en medio salió un gran joven de azul para hablar conmigo. El Museo estaba abierto pero yo no tenía tiempo para poder visitarlo. Tras unas palabras me señaló una botella de agua que se había quedado en el banco de piedra, molestando la fotografía. Y efectivamente, he tenido que retocarla.

Viendo la fotografía me ha venido a la mente toda aquella escena de una mañana nublada en Martorell. La fotografía es a veces mucho más que una instantánea, puede ser incluso un par de minutos.

The Beatles y sus 50 años de la histórica fotografía en Abbey Road

Ayer se cumplieron 50 años de esta mítica fotografía donde podemos ver a The Beatles cruzando un paso de cebra en Abbey Road de Londres, uno detrás de otro. John Lennon, Paul McCartney, George Harrison y Ringo Starr.

Fue la imagen de portada de su disco Abbey Road y se convirtió en una de las fotografías más icónicas y reconocibles en todo el mundo. Las fotografías del grupo en diversas posiciones la hizo un amigo de The Beatles: Iain Macmillan, y ha asegurado en múltiples ocasiones que tardó tan solo 10 minutos en retratar a la famosa banda británica, para luego en el estudio elegir esta imagen como la portada.

Era el 8 de agosto de 1969, a las 11.35, y un agente de tráfico cortó la circulación en la esquina de las calles Abbey Road y Garden Road, en el tranquilo barrio londinense de St. John’s Wood, para poder realizar la sesión de fotografías.

El tiempo ha convertido a esta fotografía en icono de unas formas de entender el arte, musical y gráfico, y en una imagen histórica.

8.8.19

El ojo del árbol de Salinas. Un ojo de más

Los árboles también tienen ojos. No ven por ellos, pero los tienen. Y cuando no los tienen se los ponen. Un árbol sufre cuando le ponen un ojo artificial, como sucede con cualquier ser vivo. Tenemos los ojos que nos corresponden, ni uno menos ni uno más. Si acaso… si acaso alguno menos.

5.8.19

¿Y si la propia cuerda es ya un caos?

El caos es la falta de orden. O el orden no entendido. O el amontonamiento del orden. O lo que se intuye detrás del orden. 

Van unidos el caos y el orden pues sin el uno no puede existir el otro. Se necesitan para comparar y para complementarse. 

Estas maderas, este montón de palos parecería otro si no tuviera la cuerda amarilla que le diera sentido de orden. ¿Para qué sirve una cuerda? ¿Y si la propia cuerda es ya un caos?

Puerta de acceso. De entrada y de salida en la Universidad de Zaragoza

Líneas universales. Luces y sombras cortadas por líneas. Fotografía de líneas, de rayas, de rectángulos. Universidad universal. Puerta de acceso. De entrada pero también de salida.