Enmarcar es elegir. Es mirar por un hueco de tu ojo bueno, y seleccionar lo que te gusta. Puedes enmarcar con marco o sin marco. Solo con la intención, con la mirada, con el juego de formas.
Pero siempre que enmarquemos debemos dejar claro que el marco lo hemos elegido nosotros, que no es una casualidad, un tropezón, un accidente fotográfico.