Los objetos pueden simular vida, gestos, detalles de movimientos falsos.
—¿Quieres tomarte una copita conmigo?
— NO. Está vacía, no hay ni ganas, son las 9 de la mañana y a estas horas uno toma café.
Y tu mano de madera está llena de engranajes que tropezarían con la mía. No ha sido posible el encuentro amistoso.
—Aunque deberíamos empezar por definir si somos del mismo sexo ¿no?
Sí, es verdad, yo me tomo copas con personas de todas las maneras, con tal de que tengan buen hablar.