La libertad de conocer, la libertad real de prensa, de saber y poder discernir, va por países, por zonas, por sociedades.
Lo que en algunas partes del mundo vemos con normalidad, puede estar prohibido en otros lugares.
La globalización no funciona por igual en cuanto a las libertades públicas. Tampoco en la privadas.
Curiosamente a veces funciona la Censura sin tener que prohibir nada de nada, sin que lo parezca. Cosas de la inteligencia política.
Ahora, en este 2025 y antes en el 2024, sabemos lo muy justo de las guerras de Ucrania o Gaza. Se nos enseña lo que permiten aquellos que gobiernan las violencias.
El resto, como no lo vemos, es como si no existiera. Sabemos que hay en Gaza ya unos 60.000 muertos, pero no son 60.000 veces una persona destrozada, es solo un número.
Sabemos que en Ucrania mueren jóvenes rusos y ucranianos destrozadas por máquinas modernas. Se quedan sin cara o sin miembros. Pero debe ser mentra pues nos lo quitan de nuestra mirada para que no suframos.