5.9.25

Gatera que no se ve bien


Hay artistas creadores de fotografía que solo utilizan el blanco y negro. Vuelven a los orígenes de la fotografía buscando contrastes y puntos de vista que no vemos en la realidad. De esa manera además de poner su impronta personal eligiendo canales o mezclas de colores, consiguen mostrarnos una realidades desde un punto irreal, casi surrealista, al jugar con su particular manera de ver lo que existe.

Uno de los más famosos fue Sebastião Salgado al que es imposible copiar, por multitud de motivos, entre ellos su particular manera de ver paisajes y sobre todo personas laborando. Supo estar entre ellos sin molestar mucho, supo captarlos en sus momentos más duros, y además supo cazar instantes espectaculares de una naturaleza salvaje que parece increíble.

Admitimos muchos que es imposible llegar a poder acercarnos a su maestría fotográfica, pues Sebastião Salgado era único como artista fotógrafo. Y hemos de reconocer que sin la presencia de personas en sus fotografías, su obra sería diferente, puede que algo menor, y sin duda menos trascendente.

Una simple puerta, como es el caso que vemos arriba, una fotografía mía, nos dice poco, pero nos muestra el paso de personas por ella. Incluso y además de los años y los destrozos, quiere mostrarnos el hueco por donde posiblemente entraban y salían los gatos.

Esa gatera en este caso nos la podemos imaginar en su lado roto y medio tapado para que no vuelvan a entrar, pero también nos la imaginamos ya tapada en la zona de la chapa puesta para evitar humedades de las lluvias. 

Durante siglos, una casa sin gato no era un hogar, pues siempre sería pasto de los ladronzuelos con cola larga.